Silver Bullet – «Shadowfall»

2023 Reaper Entertainment

Empezamos el año con mucha fuerza en cuanto a lanzamientos, lo cual me hace presagiar otro año de locura musical.

Si hace unos días teníamos el enorme placer de escuchar en primicia y reseñar la magna obra de Marco Garau’s Magic Opera «Battle of ice», ahora llega a mis oídos esta maravilla sonora que han editado los finlandeses Silver Bullet.

Repasando un poquito su historia, vemos que la banda se formó en 2008 bajo el nombre de Dirge Eternal por el ex cantante de Dreamtale Nils Nording y el bajista de Turisas Hannes Horma pero hasta 2016 no sale a la luz su primer lanzamiento «Screamworks», del cual todavía no he podido escuchar nada (cosa que remediaré en breve si consigo desengancharme de Shadowfall).

En 2019 apareció Mooncult, segundo disco, con el cual yo los conocí, y con el que me volaron la cabeza con su heavy power de altísima potencia y con un grandísimo Nils en las tareas vocales. Y cuando parecía que todo se les ponía de cara para ejecutar una gira con Twilight Force (que pronto pasarán por Rockmania), Majestica y Dragony, el maldito corona lo estropeó todo.

Y en 2023 nos presentan este discazo con el cambio, para mi gusto, de lo mas acertado en las tareas vocales, ya que ha entrado a formar parte de la banda Bruno Proveschi, en el lugar de Nils Nording. Ni se los motivos ni me importan mucho, ya que, para mi gusto particular, la banda ha ganado muchos enteros con el cambio.

La banda queda formada para este Shadowfall por:

  • Bruno Proveschi a las voces
  • Hannes Horma a las guitarras
  • Henri Asikainen a las guitarras
  • Ossi Elonen al bajo
  • Patrick Albrecht a la batería

El trabajo nos presenta una portada espectacular diseñada por el artista Pierre Alain D (diseñador que no conocía, pero que he investigado un poco y aparte de diseños espectaculares, ha realizado portadas para Rodhium y Zenobia, entre otros muchos grupos). La figura de una guerrera y de fondo una especie de mundo apocalíptico en tonos marrones es embriagadora a la par que sencilla y efectiva.

Y en lo musical, nos encontramos diez cortes y unos 45 minutos de una mezcla de heavy power metal tan asombrosa que se pasa volando, y que provoca volver a dar al play. Sin más, adictivo.

La banda en global ha rozado casi la excelencia, me parece que el trabajo de todos ha sido soberbio, y nos han entregado un disco sin un ápice de relleno. ¿Disco del año? Es pronto para decirlo, pero firme candidato desde el minuto cero.

Empieza el disco con la intro «Overture to Armagedon», con toda la epicidad posible, al más puro estilo película de ciencia ficción, para desembocar en el tema «Shadow of a course», trallazo de heavy-power metal que literalmente te hace saltar de la silla y ponerte a mover la cabeza al ritmo de la canción. Guitarras veloces, ritmos galopantes, coros épicos y la característica voz de Bruno, que brilla con luz propia sin estridencias, pero con una fuerza asombrosa, nos demuestran que el disco apunta muy alto.

Continua el tema «The Ones to Fall» y aquí un servidor, se pone a llorar fuerte porque la emoción le embarga. Es sencillamente uno de los mejores temas del disco, posee una fuerza arrolladora y unos coros/estribillos tan grandilocuentes que se te clavan en la cabeza y no salen, os lo prometo. «We are the Ones, the Ones to fall» reza el estribillo!! (y sin el libreto de las letras que todavía no tengo).

«Creatures of the night», es el cuarto corte del disco, con un comienzo al más puro estilo Iron Maiden, con una guitarra que va creciendo, acompañando a la voz, para desembocar en unos teclados que acolchan el tema, en lo que posiblemente sea el tema mas cercano al hard rock (rara avis en el disco). Podríamos decir que es un pequeño respiro para lo que se nos viene a continuación.

«Soul Reaver», quinto tema del disco, es el mejor tema que he escuchado este 2023 sin duda. Velocidad en estado puro, esos riffs, parecen provocar fuego en las cuerdas. La batería y el bajo parecen metralletas disparando notas sin parar y los estribillos son de los más potentes y agresivos del disco. Sencillamente sublime y que, si llevara la firma de otras bandas como Blind Guardian o Stratovarius, estaría sonando en todas las radios de metal de Europa. El mejor tema del disco sin dudarlo.

«And the comes Oblivion», sexto corte del trabajo, la balada y señores, que baladón!!!!! Los vellos de punta cada vez que la escucho, fuerza, pasión, rabia, dulzura, sentimientos que te afloran en los poco más de tres minutos que dura. Sublime y la voz de Bruno, sobresaliente, provocando con sus notas todos los sentimientos antes descritos.

«Nighthunter», séptimo tema, nos devuelve a los Silver Bullet más cañeros y veloces. Temazo de principio a fin, con una fuerza y potencia digna de estudio. Al más puro estilo heavy metal de corte alemán, de bandas como Primal Fear. Caña y agresividad entremezclada con la melodía de los puentes y los estribillos. Espectacular.

«Dusk of Dawn», octavo tema y la joyita oculta del disco. Tema donde la epicidad de los teclados brilla con luz propia. Cuando se conjuga la potencia y la contundencia de un mid tempo ejecutado a la perfección con la épica de los coros y los teclados, el resultado es un temazo como este. Sublime.

«Falling dawn», noveno corte, donde nos vuelven a dar una magistral clase de power metal europeo, de principio a fin. Insisto que si llevara la firma de bandas más «conocidas» estarían radiándolo en todas las fm del metal. Ritmos contundentes a la par de melódicos, estribillos que te atrapan, el abc del power metal, pero ejecutado de diez.

Y acaba el disco con el tema largo, como mandan los canones. «The Thirteen nails», tema donde se explayan, donde dan rienda suelta a sus instrumentos, a su virtuosismo y donde como se suele decir, dan el do de pecho. Todos los ingredientes anteriormente descritos están incluidos en este tema. Perfecto broche de oro al disco.

Discazo, de principio a fin, disfrutable, adictivo y emocionante, que crece con las escuchas y que es más que digno sucesor de su «Mooncult» de 2019.

Haceros un favor, los que leais esto, escucharlo y comprarlo. Altamente recomendable.

Fotografías cortesía de la página de Facebook de la banda.