Maravilla y joya son dos calificativos que describen perfectamente lo que representa y lo que engloba este trabajo de Nergard.
Lástima que, entre la vorágine y estallido mundial de lanzamientos discográficos, debidos a la ausencia de giras por culpa de la maldita pandemia, este disco se me pasara durante todo el año y lo llegara a descubrir en la semana de navidades de este 2021.
¡¡Así que lo considero un regalo de Navidad y que gran regalo!!
Esta banda era completamente desconocida para mí. De vez en cuando los algoritmos de Facebook me la recomendaban, pero como expresé antes, ha sido imposible atender a todos los lanzamientos. Incluso en un programa de radio, del que soy asiduo oyente, «El Octavo Día» de Radio Cornellá, lo pincharon alguna vez, pero aquello que en aquel momento conduces y no puedes apuntar el nombre y luego se pasa entre los quehaceres diarios.
Decir que la semana de Navidad ya le había conseguido dar alguna escucha que otra, pero superficialmente, hasta que en el mencionado «El octavo día» hicieron un programa con 50 de los temas más representativos del 2021 y el presentador y conductor del programa, el Sr. Toni Lopez pinchó a Nergard y el tema «Beneath Northern Skies» y caí rendido a la banda. Dejé el programa tras el tema y me puse a escuchar el álbum completo prestándole atención y la conexión fue instantánea. Y a partir de ahí, escucha casi diaria del disco pues me parece un trabajo sublime, espectacular tanto a nivel melódico como a nivel de sonido y producción. Joya, creo que es el mejor adjetivo que se le puede poner a este disco.
¿Y de dónde procede o de dónde surge Nergard? Pues esta banda es el proyecto del compositor noruego Andreas Nergard y como proyecto siempre tuvo en mente tener un proyecto muy ambicioso al querer reunir talentos locales de Noruega con talentos conocidos a nivel mundial.
Y este «Eternal White» es su tercer trabajo ya, después de su disco debut «Memorial For A Wish» en 2013 y «A Bit Closer To Heaven» en 2015. Hay posteriormente una regrabación del «Memorial For A Wish» en 2018 y este «Eternal White» en 2021.
La banda está encabezada por 3 cantantes, Stefani Keogh (Reino unido), Andi Kravljaca (Suecia) y Mathias Molund Indergard (Noruega) y hasta aquí toda la información de los músicos. Ya que no se sabe la identidad del resto de la banda a excepción de Andreas Nergard. Otro detalle más de que lo quiere que prime es la calidad musical y no los nombres. La verdad es que me encanta este concepto. Deseo que me enamore la música, no los nombres de los participantes.
La portada (no he conseguido averiguar al autor) es tan explícita como la temática del disco. Unos soldados en un campo de batalla helado que representan la historia de la Marcha de la Muerte de Carole de 1719 donde más de 3000 soldados suecos y noruegos murieron congelados durante la retirada de la fallida invasión de Noruega. El artwork es completamente fascinante.
Y en lo musical, nos encontramos ante 10 temazos de symphonic metal. Temazos todos desde el segundo uno hasta el final, en los cuales todos los instrumentos suenan espectaculares y poderosos y sin pisotearse unos a otros. Las líneas vocales son sublimes, dándole una variedad de tonalidades y de sentimientos que me ha erizado todos los vellos del cuerpo. Y las orquestaciones son tan buenas que rozan la perfección, dándole la grandilocuencia que merece tan magna obra.
Ya la apertura del disco nos deja bien claro a lo que nos vamos a enfrentar. Symphonic metal aderezado con tintes power y orquestaciones al más puro estilo Nightwish, Kamelot o Avantasia por poner algún ejemplo. El tema «God Forgiven My Haunted Mind» es la mejor carta de presentación posible y al finalizar el tema ya has sucumbido al placer «orgásmico» de las composiciones de Nergard.
Y después de tan magno inicio, ya no puedes parar. El mundo se paraliza a tu alrededor mientras te adentras en los campos de batalla noruegos.
Temas como «Pride Of The Nord» o «From The Cradle To The Grave» no hacen más que sumergirte más y más en la historia y la música, de tal forma que es como si hubieras caído en arenas movedizas. Es tan embriagador y absorbente que no puedes ni plantearte el pulsar el stop del reproductor.
En «Carry Me» (4º tema) los sentimientos y emociones florecen de la mano de Stefani, ya que, en este tema, a caballo entre el medio tiempo y la balada, su voz brilla con luz propia y provoca que lágrimas de emoción resbalen por mis mejillas.
Y ojo que también tenemos cabida a los temas mas cañeros, como es el tema «Where No One Would Shed A Tear» que posee unos riffs y unas baterías que se acercan incluso al thrash metal, pero sin perder la esencia sinfónica. Quizás el tema mas cañero de todo el disco.
También hay cabida a las colaboraciones en este disco, aunque solo una por lo que he podido averiguar. El Sr. Ripper Owens colabora en este tema, aunque de una manera «especial» ya que no utiliza para nada sus típicos agudos imposibles, utiliza un tono mas neutro que hace hasta difícil reconocer su voz en el tema. Un medio tiempo denso y contundente.
Para mí, los mejores temas y los que recomiendo para caer rendido a los pies de este trabajo son «God Forgive…», «From The Cradle…», «Carry Me» y «Beneath Northen skies». Si con estos 4 temas no te enganchas a este disco, no pierdas el tiempo. Y si por el contrario te han gustado, has caído irremediablemente en sus redes y posiblemente no te has dado cuenta, pero no podrás dejar de escucharlo y de tararear los estribillos de sus temas.
Un discazo de principio a fin, que espero en breve poseer físicamente y que lamento profundamente no haberlo descubierto antes, pues estaría en mi top 10 con total seguridad.
Si os gustan bandas como Nightwish, Kamelot, Avantasia y similares, y no los conocéis todavía, haceros el favor de vuestra vida y escuchar a Nergard.
Fotografía cortesía de la web oficial de Nergard